Un compuesto del aguacate llamado
avocatina B ha demostrado en un estudio que podría ayudar a quemar las
grasas, controlando la ganancia de peso, y a evitar el desarrollo de
diabetes tipo 2 y obesidad.
El aguacate se ha convertido en el alimento de moda, en parte por la gran cantidad de beneficios que aporta a la salud, gracias a sus grasas monoinsaturadas, sus minerales, vitaminas y antioxidantes.
Además, según un estudio realizado por miembros de la Universidad de Guelph (Canadá) también podría ser una herramienta útil para evitar la obesidad y el desarrollo de enfermedades metabólicas como la diabetes tipo 2.
La investigación, que se ha publicado en la revista Molecular Nutrition and Food Research, ha sido realizada en roedores y algunos de los ensayos en humanos. Los resultados mostraron que la avocatina B (AvoB), uno de los compuestos exclusivos del aguacate, es capaz de controlar el aumento de peso y frenar, o incluso impedir por completo en algunos casos, el desarrollo de enfermedades metabólicas, como la resistencia a la insulina o la diabetes tipo 2.
Comer un aguacate podría ser insuficiente para obtener la avocatina B, pues su cantidad varía en los frutos naturales, por lo que se están desarrollando suplementos
A los animales del estudio se les alimentó durante ocho semanas con dietas saturadas en grasas con la finalidad de que desarrollaran obesidad y resistencia a la insulina. En las cinco semanas siguientes a la mitad de los ratones se les administró un suplemento de avoB mientras seguían tomando alimentos con grasas.
Al terminar la investigación, aquellos que tomaron la suplementación habían engordado más despacio y su peso era menor que el de aquellos que no lo habían recibido. En cuanto a su salud, había aumentado su sensibilidad a la insulina, lo que hacía mucho más efectiva la quema de glucosa en la sangre.
La avocatina B ayuda a que el organismo queme las grasas
El resultado, según explican los autores, es que la avocatina B de los aguacates ayuda a inhibir las actividades celulares que en otras circunstancias podrían hacer que el paciente desarrollase diabetes. Concretamente protege a las mitocondrias –las encargadas de quemar u oxidar las grasas– del sobresfuerzo al que son sometidas cuando el individuo tiene obesidad.
Si estas mitocondrias dejaran de oxidar las grasas, además de acumularlas en el organismo, también se tendrían más posibilidades de desarrollar resistencia a la insulina, el paso previo a la diabetes. En este punto es donde interviene la AvoB, ayudando a esa oxidación o quema de grasas y protegiendo el páncreas y las fibras musculares esqueléticas.
Pero no todo es optimista en este estudio pues, aunque las pruebas en humanos han demostrado que el compuesto se absorbe por completo en el organismo sin efectos secundarios, todavía se desconoce cuál es la dosis adecuada y su seguridad, que se irán analizando en estudios posteriores.
Además, Paul Spagnuolo y el resto de autores han subrayado que comer aguacates enteros podría no ser eficaz para obtener la avocatina B necesaria, pues dependiendo del fruto las cantidades serán diferentes. Por ello, la idea que plantean es crear unos suplementos con este compuesto en formato píldoras y polvos solubles, un planteamiento que ya cuenta con la autorización de la Sanidad canadiense.
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