17 ingredientes en total, entre ellos, altas cantidades de aspartame (900 mg) y el mango que contiene no llega ni a 1 gramo.
Échale un vistazo a nuestras radiografías de productos: sencillas, concisas y completamente documentadas.
Tang sabor mango (1 sobre para 2 litros):
Azúcar:
0 gramos. Es un producto que se caracteriza por no contener azúcar, sin embargo contiene edulcorantes artificiales (también conocidos como azúcar “de dieta”) en cantidades considerables.
Contiene aspartame (600 mg) y acesulfame potásico (300 mg), dando en total 900 mg de edulcorantes.
En la actualidad existen miles de productos que contienen aspartame (inclusive, existen ciertas categorías de productos que son difíciles de encontrar sin edulcorantes no calóricos como chicles, gelatinas, etcétera).
Desde su incorporación al mercado se han realizado varios estudios en los cuales se han encontrado resultados de toxicidad. Estos estudios han sido mostrados a la FDA con respecto a la toxicidad del aspartame, razón por la cual sigue en evaluación y exigencia para su adecuada regulación.
Sodio: 210 miligramos (mg).
Un sobre cubre el 10.5% del sodio total recomendado para para un adulto para todo el día. Para el caso de un niño cubre el 14%.3
Ingredientes:
Maltodextrina, ácido málico, edulcorantes artificiales (aspartame 4 g/100 g y acesulfame potásico 2 g/100 g), ácido cítrico, pulpa de mango deshidratada (6%), citrato de sodio, goma xantana, colorantes (dióxido de titanio, caramelo clase IV, tartrazina y amarillo ocaso FCF), dióxido de silicio, goma guar, ácido ascórbico (vitamina C) y saborizantes naturales y artificial a mango.
El producto es básicamente un cóctel de químicos, ya que es una mezcla de edulcorantes artificiales (azúcar de dieta), ácidos, colorantes artificiales y saborizantes.
Además del alto contenido de aspartame, contiene varios ingredientes que se ha visto tener efectos adversos en la salud. Estos son: dióxido de titanio, caramelo clase IV, tartrazina y amarillo ocaso.
Es frecuente que los consumidores perciban el producto como una mejor opción porque “contiene azúcar normal”, “no contiene azúcar” y/o “contiene mango”. En cualquiera de las percepciones la mayoría desconoce por completo que es un polvo lleno de químicos perjudiciales a la salud y que el mango que contiene no llega ni a 1 gramo.
Tampoco se logra percibir que es un producto NO recomendable para niños y niñas o mujeres embarazadas, y que para adultos se recomienda tener precaución.
¡Cuidado! El aspartame es un potencial cancerígeno. Por ello se requiere una reevaluación de su uso para que se lleve a cabo una regulación.
Las diferentes evaluaciones han determinado contundentemente que dicho ingrediente no se recomiende en mujeres embarazadas o niños como principio precautorio.
Para el caso de los adultos es importante se conozcan las reacciones que se han observado en pacientes y los efectos secundarios que se presentan ante su consumo, como pueden ser mareos, dolores de cabeza, nausea, vómito, uticaria, diarrea, elevación de la presión, ataques de ansiedad, confusión, pérdida de memora, irratibilidad, depresión, palpitaciones, taquicardia, cambios en la conducta abruptos, aparición de tumores a nivel neuronal y alteraciones en sistema nervioso.
Es de carácter imperativo se alerte a padres de familia con respecto a este tipo de productos, ya que es frecuente se utilicen como alternativa para sustituir aguas frescas para acompañar las comidas, en donde toda la familia lo consume.
Lo más preocupante es que quienes más sufren las consecuencias de esta falta de información y falta de opciones saludables son quienes cuentan con menores recursos económicos. Es por ello que organizaciones de la sociedad civil exigimos mejoras en la regulación del etiquetado en México.
El etiquetado es llamativo, con colores brillantes y atractivos.
En la parte superior se observa el nombre del producto y justo debajo una imagen de un mango jugoso.
Las imágenes y las leyendas promocionales son visibles, pero la información nutrimental no.
Las letras son de uno o medio milímetro y no se logra detectar fácilmente la cantidad de ingredientes, mucho menos que son químicos (salvo la pulpa deshidratada).
Tampoco se observa ninguna leyenda precautoria para alertar a padres de familia acerca de las altas cantidades de edulcorantes e ingredientes artificiales que contiene, mucho menos sus riesgos (salvo una alerta a fenilcetonúricos).
Existen familias que optan por adquirir el producto porque es menos costoso y alcanza para toda la familia y por lo general cuando se compra se opta por llevar más de un sobre.
Además, los consumidores difícilmente lograrían percibir que es un producto totalmente inapropiado para niños escolares, preescolares o niños pequeños.
Como ya se ha estado exigiendo internacionalmente es de carácter imperativo exista una regulación en México para productos que contengan ingredientes que se han comprobado ampliamente ser cancerígenos, como el aspartame.
Inclusive, la misma Secretaría de Salud ha realizado recomendaciones de que los edulcorantes no calóricos no son apropiados para niños y niñas.
Es imprescindible permitir a los consumidores tomar decisiones informadas respecto a su alimentación, especialmente a padres de familia.
Evitar en niños y niñas, adultos valorar por su alto contenido de edulcorantes no calóricos.
Te proponemos:
Agua de mango casera. Si se incorpora azúcar de preferencia que sea azúcar mascabado, piloncillo o miel.
elpoderdelconsumidor
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