Vacunación método Eugenésico diseñado por Templarios y Aristócratas Masones
En 1714 el gobierno británico creo la falsa noticia de que en Turquía se trasladaba la pus de gente enferma de viruela a la gente sana para protegerlos de la enfermedad. En 1718 la aristócrata Lady Wortley Montagu, la esposa del embajador británico en Constantinopla. Se posiciono a favor de este método conocido como “inoculación” o “variolación” y gracias a su prestigio consiguió ganar la confianza de mucha gente. Con el resultado de que muchos inoculados enfermaron gravemente y muchos otros murieron. En los siguientes años hubo un aumento de 25.000 muertes por la viruela en Londres.
En Weimar (Alemania) el famoso médico sajón e Illuminati Christoph Wilhelm Hufeland, provoco una epidemia de viruela de la misma forma después de que se implantara la “variolación” en 1781. Hamburgo y Berlín también sufrieron grandes epidemias en 1794 y 1795, después de la implantación del procedimiento. Por lo que poco después fue prohibido en muchos países.
El medico ingles y masón Edward Jenner seria el encargado de continuar estudiando este procedimiento utilizando el pus de las vacas en vez de el de los humanos (mas tarde mezclo los dos). Jenner era un masón activo, sirviendo en 1812 como Maestro de la Real Logia de Fe y Amistad, No. 270, con sede en Berkeley, Gloucestershire. Esta logia fue visitada regularmente por el Príncipe de Gales, el futuro Jorge IV, y era una logia que se asociaría con la familia Jenner.
La primera víctima de Jenner fue su propio hijo que apenas contaba con 10 meses de edad y con el que probó la mezcla del pus de vacas y humanos en 1790. El desarrollo mental del niño quedo truncado y vivió como retrasado mental el resto de su vida hasta que murió con 21 años de edad. En 1798 Jenner vacuno al niño de cinco años John Baker, que murió poco después. También vacuno a una mujer embarazada de ocho meses que provoco la muerte del bebe cuya piel se cubrió con llagas similares a las de la viruela.
Al contrario de lo que nos han hecho creer las enfermedades como la tos ferina, difteria, polio y sarampión fueron prácticamente eliminadas antes de la introducción de sus respectivas vacunas. Más bien, la disminución de estas enfermedades infantiles no se debió a las vacunas (como se dijo), sino que fue debido principalmente a la mejora de la salud e higiene públicas (incluido el saneamiento y el agua potable más limpia) durante ese periodo de tiempo.
Desde 1806 la vacuna contra la viruela se ha convertido en una obligación legal en los estados alemanes y a partir de 1875 se impuso una segunda vacuna a los 12 años de edad. También Inglaterra y Francia continuaron con la obligación de vacunar a toda la población contra todo tipo de enfermedades y desde la Segunda Guerra Mundial, EEUU tiene un papel primordial en este terreno, apoyado por la ONU y la OMS.
La ONU ha sido denunciada por sus propios expertos por llevar el cólera a Haití y la OMS y UNICEF han sido acusadas de amparar vacunas para controlar el crecimiento poblacional. Las vacunas actuales y desde hace ya varias décadas contienen todo tipo de tóxicos cancerígenos y mortales como Formaldehído, formol, Timerosal (mercurio), Fosfato de aluminio, Borato sódico además de ADN foráneo, ARN y proteínas que pueden provocar alergias y enfermedades autoinmunes de bacterias, hongos, levaduras, suero fetal bovino, tejido renal de mono, restos de fetos abortados, GMS (Glutamato monosódico) y muchas otras sustancias que nunca sabremos.
¿Usted qué cree que sucedería si llamase a su médico de cabecera para consultarle cual es la “dosis segura” de mercurio, aluminio y formaldehído, para podérselo inyectar a su hijo?. En lo que respecta a la ciencia real, no hay evidencia alguna de la efectividad de las vacunas que se obligan a poner a las distintas poblaciones, no solo eso sino que lo mas probable es que te deterioren la salud. En cuanto a la inmunidad de las vacunas tampoco existe evidencia alguna de que deba vacunarse usted o sus hijos, nunca, por ninguna razón. Soy muy consciente de que las vacunas se consideran “sagradas” para la mayoría de los médicos. De hecho, cuestionarlos equivale a una blasfemia. Puedo asegurarle que no cuestionaría la eficacia y la seguridad de algo tan “sagrado” como las vacunas a menos que estuviera seguro, sin duda alguna, de que soy correcto cuando declaró que las vacunas no son seguras (a menos que usted cambie el criterio) definición de “seguro” para incluir la muerte, numerosas enfermedades y daño cerebral.
Aunque no se mencione en ningún medio existen estudios que muestran que la gente que no se vacuna tienen muchas menos posibilidades de sufrir enfermedades crónicas. Los niños vacunados tienen un 120% mas de asma, un 146% mas de autismo, un 185% mas de trastornos neurológicos y un 317% mas de TDAH que los niños no vacunados.
En el mundo actual según datos recopilados por ‘Our World in Data’, mueren cada año unas 56 millones de personas. El principal motivo son las enfermedades cardiovasculares, que se cobran alrededor de 18 millones vidas; seguido del cáncer, responsable de casi 10. ¿toman los gobiernos alguna medida al respecto? ¿crees que si existiese una vacuna contra el cáncer te la darían gratis?.
Promover la vacunación obligatoria para poblaciones enteras con productos que dependen esencialmente de los datos de los fabricantes para su seguridad y eficacia generales es una violación evidente del principio de precaución y, como tal, se convierte en un experimento médico forzado. Si te recomiendan y obligan a vacunarte. Puedes pedirle a el médico que te firme una “Garantía Emitida por el Profesional Médico sobre la Seguridad de las Vacunas“. Te aseguro que ningún medico lo hará.
Si está interesado en informarse más a cerca del peligro de las vacunas le recomendamos la lectura del libro del escritor y profesor en medicina natural Adolfo Perez, titulado; LAS VACUNAS: PELIGROS Y ALTERNATIVAS.
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