Radiografía de productos transnacionales: Levité de Bonafont sabor fresa (1.5 litros)

• Levité de Bonafont no es sólo agua, es también abundante AZÚCAR (una botella de litro y medio de esta bebida contiene casi 15 cucharadas).
• Su publicidad es engañosa, pues induce a creer que es sólo agua con un “toque” de sabor.
• Hacerla pasar como una opción saludable constituye un real riesgo para la salud de la población.
• Mejor licúa agua y fresas con un poco de azúcar moscabada… ¡y listo!

Es común que las personas se vayan con la finta —como decimos en México— y utilicen agua Levité de Bonafont como una opción alternativa al agua simple. 

Craso error, pues no saben que tan sólo un envase de litro y medio de esta bebida —que es el tamaño más común— contiene casi 15 cucharadas cafeteras de azúcar. 

El alto consumo de azúcar, especialmente a través de bebidas, está directamente asociado al sobrepeso y obesidad. 

La engañosa publicidad de esta bebida como una opción saludable constituye un real riesgo para la salud de la población. 

Observa la radiografía con la que la nutrióloga Xaviera Cabada, coordinadora de Salud Alimentaria de El Poder del Consumidor, nos desentraña las verdaderas características y el valor nutricional de este producto.

Levité, de Bonafont, sabor fresa de 1.5 litros:

Azúcar:

71.25 gramos por envase, lo cual equivale a 14.25 cucharadas cafeteras de azúcar. Esto cubre del 203 al 285% de lo que un adulto puede consumir para todo el día, de acuerdo con la Asociación Americana del Corazón, pues este organismo indica que la cantidad de azúcar máxima tolerada para un adulto es de 5 a 7 cucharadas cafeteras de azúcar para todo un día (circ.ahajournals.org/content/Dietary Sugars Intake and Cardiovascular Health: A Scientific Statement From the_.pdf+html). 

Por su parte, la Organización Mundial de la Salud establece que no se debe superar más del 10% de las calorías totales, no excediendo 10 cucharadas de azúcar añadida para todo el día (www.who.int/dietphysicalactivity/Global Strategy on Diet, Physical Activity and Health.pdf). Así, conforme con este límite máximo, una sola botella de litro y medio de Levité cubre el 140% de azúcar.

Es común que las personas se vayan con la finta —como decimos en México— y utilicen agua Levité como opción alternativa al agua simple. Craso error, pues no saben que tan sólo un envase de litro y medio de esta bebida —que es el de consumo más generalizado— contiene casi 15 cucharadas.

Sodio:

120 miligramos. 

Pero, ¿por qué una bebida azucarada contiene sodio? 

Se ha visto que la industria de alimentos y bebidas utilizan el sodio como ingrediente para dar mayor palatabilidad a los productos, es decir, para diluir el sabor intensamente dulce de los azucares y que nuestro paladar lo soporte. 

Pero además, también se ha visto que combinar azúcar, sal y/o grasa produce una sensación placentera al paladar que a largo plazo genera adicción (books.google.com.mx/The End of Overeating: Taking Control of the Insatiable American Appetite).

Ingredientes:

El segundo ingrediente es azúcar. Después: ácido cítrico, saborizante (no se establece qué saborizante), ácido málico, sorbato de potasio, citrato de sodio, estevia (edulcorante no calórico, utilizado para intensificar el sabor dulce, lo que significa que además de contener altas cantidades de azúcar, contiene este endulzante sin calorías), y polidimetilsiloxano o también llamado dimeticona (polímero proveniente del silicón, que es utilizado en los alimentos como antiespumeante books.google.com.mx/A consumer’s dictionary of food additives y que se usa también como ingrediente en champús, acondicionadores, aceites lubricantes e impermeabilizantes para la lluvia.
Como se puede observar este producto es básicamente agua, azúcar y aditivos.

Valoración general:

Producto no recomendado para su consumo.

Alternativa:

Agua de fresa. Licuar agua y fresas con un poco de azúcar moscabada… ¡y listo! 

Nota: Es importante estar alerta a los productos que se anuncian como saludables, ya que resultan más peligrosos, pues creemos que estamos consumiendo algo saludable y resulta que en realidad no lo es; sólo son engaños publicitarios. De esta manera, los consumidores no logramos detectar que dichos productos pueden ser nocivos para nuestra salud. Por supuesto, es importante tener especial cuidado si hay alguna condición de diabetes o hipertensión. Los consumidores confiados en los etiquetados frontales y las leyendas más visibles, frecuentemente hacemos caso a las promociones o a la información que más se resalta en los productos.

elpoderdelconsumidor